Hablar del hermanamiento de la Hermandad de las Angustias con la Archicofradía del Rosario, pudiera parecer algo que es fruto de un hecho puntual en el pasado, pero estudiando el hecho en profundidad vemos que el hermanamiento no es casual, pues hay muchas cosas que comparten las referidas corporaciones, como la antigüedad considerable, (la Archicofradía se funda en 1492 y la Hermandad de las Angustias en 1545), ambas ostentan los mismos titulos (Muy Antigua, Pontificia, Real e Ilustre), las dos han sido protegidas por la corona española, han atesorado multitud de patrimonio, la organización es muy parecida, y si todo esto fuera poco ambas corporaciones tienen su sede muy cerca.
Las dos devociones, han sido las predilectas de los granadinos durante siglos, y aquí viene la gran leccion que nos dieron nuestros mayores, en vez de rivalizar las dos hermandades, hacerse zancadillas y juegos sucios, surgió el sincero hermanamiento.
Aunque hasta la fecha no se tengan datos, no es un disparate el aventurar que existiera previamente buena relacion entre ambas corporaciones, máxime teniendo en cuenta que el terreno donde se alzan las casas que hay frente a la Basílica formaban parte de las propiedades del Convento de los PP Dominicos.
Si no hubiera existido una buena relación no se entiende cómo de un hecho puntual, el refugiarse la imagen de la patrona en Santo Domingo, surgieran lazos tan profundos que se han mantenido en el tiempo hasta el día de hoy.
No bastó con que la Imagen de la Virgen de las Angustias se refugiara en Santo Domingo de la lluvia, para regresar a su templo en cuanto dejara de llover, sino que la Archicofradía le dedico una novena a la Imagen allí resguardada, sin escatimar en nada, tras lo cual, la Virgen de las Angustias, regresó a su templo de la Carrera.
Durante esta novena se selló el hermanamiento, y como recordatorio de tan fausto evento, ambas corporaciones se intercambiaron ricos presentes. La hermandad de las Angustias regaló a la Virgen del Rosario seis lámparas de plata y la Archicofradía del Rosario costeó una de las columnas de mármol del retablo de las Angustias, que estaba ejecutándose en aquellas fechas.
Desde entonces, la Hermandad de las Angustias y la Archicofradía, celebran en total unión de manera conjunta a sus titulares, celebrando la Santa Misa y predicando los párrocos respectivos, el 15 de Septiembre el párroco de Santo Domingo en las Angustias, y el 12 de Octubre el párroco de las Angustias en Santo Domingo.
Cabe advertir que no son actos meramente protocolarios, sino que ambas hermandades honran a la Virgen Maria , sin reparar en una concreta advocación o particularismos pueriles y lo hacen con lo mejor que lo pueden hacer los cristianos, con la Santa Misa.